Cuándo le pregunté lo que pensaba su iglesia evangélica acerca de la esclavitud y el racismo al mismo hombre que discrimina la homosexualidad, me respondió:
"Bueno, evidentemente la iglesia evangélica discrepa en todo sentido de la esclavitud y lo considera como un punto horrible en el que la sociedad ha fijado sus esfuerzos. Como evangélicos creeemos firmemente en la igualdad de las personas."
Me alegré al escuchar eso. Hace treinta años, iglesias como estas avalaban la esclavitud, mientras que hoy en día la condenan. Significa que en treinta años más, las futuras generaciones homosexuales no serán reprimidas, sino apolladas.
Esta misma persona evangélica, que es un homosexual reprimido por sus dogmas, deberá vivir una vida de mentira, ya que su Dios actual, no lo acepta como él es.
"Cómo cambia Dios en treinta años..."
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1 comentario:
Dogmas dogmas y más dogmas...
Creo en un dios creador a imagen y semejanza, tiene los mismos problemas que yo, está confundido a veces otras triste y otras se le escapa el corazón por la boca de alegría... Te lo presento ? Vive en mi corazón :) ese es mi Dios...
Iglesias = Mentiras!
:D
Religión = metáfora ...
Homosexual reprimido = persona infeliz.
David = Persona que adoro! :D
Pía= Loca de Patio
Esteban= enjendro vegano
Los adoro.
Y ese Dios, no está en mi corazón.
El mío es un amigo, me entiende y se confunde... y sabes algo ? tiene casi mi misma edad :)
Sé feliz mi niño ! te adoro muchote
Peace.
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